sábado, 28 de abril de 2007

¡Que rico!

Anoche fui, junto con unos colegas, a cenar a un restaurante hindú. Pese a lo que os podais pensar, el curry no pica tanto como se suele pensar.

El ambiente era genial, con unos hornillos con fuego sobre el cual te ponian unos cuencos con la comida, unas cestas con pan de queso y de ajo, pan hindú con salsa de ajo, y gengibre... delicioso.

Pero lo que ya hizo que mi estómago empezase a bailar de contento fue el palto principal que pedi: Cordero Korma. Juro que hacia mucho que no comia algo tan delicioso, os animo a todos que lo probeis. Por dios, tengo ganas de comer más ya.

Definitivamente, tengo que volver a un hindú.

No hay comentarios: