¿Qué mejor forma de pasar la noche de Halloween que jugando una partida de rol de casi doce horas? En esta ocasión los jugadores que normalmente juegan via Skype (dado que viven en Francia) estaban en la ciudad, y había que aprovechar... incluido su bebé de apenas dos meses, que entre gritos, risas y otras cosas que se sueltan en una partida, estaba tan pancho.
Y, por vez primera, mi pequeña sección de juego:
Ficha, mapa, dados, hojas en sucio... y de beber y comer, por supuesto...
1 comentario:
a verdad es que estuvo bien revivir tiempos mejores, con el cheslon y todos los amigos reunidos, ains que nostalgia...
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