Pues después de instalar a la niña (ver más abajo) uno de los niños, el ratón óptico, ha muerto.
Un minuto de silencio para el.
Y alabemos al Logitech de toda la vida, que le ha sustituido (vuelta a la bolilla).
Un minuto de silencio para el.
Y alabemos al Logitech de toda la vida, que le ha sustituido (vuelta a la bolilla).
No hay comentarios:
Publicar un comentario