Como vereis un par de post más abajo, me había comprado una tarjeta muy maja para poder jugar a mis anchas al Guild Wars. Una ATI muy cuca, perfecta para mi equipo (o eso creía yo). Quería llegar y jugar, sin problemas ni nada... pero no iba a ser así. Las cosas nunca, nunca son tan fáciles como quiero que sean.
Primero murió el ratón óptico, dejandome de nuevo con un ratón de bola de los de toda la vida. Un problema menor, sin duda, pero que sería breve aviso de todo lo que estaba por venir.
Después el ordenador decidió que odiaba a la tarjeta nueva: reinicios, cuelgues, fallos gráficos... vamos que no había manera. Después de mucho probar la solución era clara: cambiar la tarjeta. Me daba mucho coraje ya que el chico de la tienda se había pasado tres semanas buscando el modelo exacto de tarjeta que le había pedido, que encima era dificil de conseguir.
Así que paseo a la tienda (Pc Coste) y a encargar otra. Gracias a dios el chico me dijo que me la cambiaban sin problemas. El paseo duraba 45 minutos de ida y otros tantos de vuelta. Sin coche y sin linea de autobus que me dejase cerca, a patear calles con frio y mucho tráfico tocaron. Esto fue el jueves.
La tarjeta llegó ayer por la tarde. Paseo a la tienda, cajas que cambian de manos, deseos de que funcione mejor por parte del ya pobre chico de la tienda y vuelta a casa. Otros 45 minutos de ida y tantos otros de vuelta.
Al llegar a casa e ir a instalar la tarjeta la "sorpresa": me habían dado una PCI cuando yo necesito una AGP. Llamada a la tienda y nuevo paseo, esta vez a la carrera porque la tienda cerraba y no llegaba. Cambio de cajas again (esta vez comprobando el contenido, por si acaso) y vuelta a casa. El trayecto de 45 minutos de ida hecho en 20 corriendo... el de vuelta en hora y media, ya reventada. A estas alturas mi salud física, mental y moral estaba por los suelos.
Llego a casa y me dispongo a probar la tarjeta (es una nVidia). Hago una nueva partición, de pruebas y un cabrón me la ataca, metiendome virus hasta en el ejecutable del antivirus (joder, hasta infectó la calculadora y el paint). Desinfectar, volver a instalar... tirarse de los pelos y darse de cabezazos contra la pared en el proceso. Todo eso en hora y media mas...
Cenar en 10 minutos un filete frio y seco y seguir probando, configurando, desinfectando...
Jugar al Guild Wars, por fin... y descubrir que la he cagado (again). Ganas horribles de ponerme a ver "Un dia de furia" pero el emule aun no funciona... a aguantarse.
Por ahora parece que la tarjeta aguanta... y tengo el alma cansada, de veras...
Aighs...
Primero murió el ratón óptico, dejandome de nuevo con un ratón de bola de los de toda la vida. Un problema menor, sin duda, pero que sería breve aviso de todo lo que estaba por venir.
Después el ordenador decidió que odiaba a la tarjeta nueva: reinicios, cuelgues, fallos gráficos... vamos que no había manera. Después de mucho probar la solución era clara: cambiar la tarjeta. Me daba mucho coraje ya que el chico de la tienda se había pasado tres semanas buscando el modelo exacto de tarjeta que le había pedido, que encima era dificil de conseguir.
Así que paseo a la tienda (Pc Coste) y a encargar otra. Gracias a dios el chico me dijo que me la cambiaban sin problemas. El paseo duraba 45 minutos de ida y otros tantos de vuelta. Sin coche y sin linea de autobus que me dejase cerca, a patear calles con frio y mucho tráfico tocaron. Esto fue el jueves.
La tarjeta llegó ayer por la tarde. Paseo a la tienda, cajas que cambian de manos, deseos de que funcione mejor por parte del ya pobre chico de la tienda y vuelta a casa. Otros 45 minutos de ida y tantos otros de vuelta.
Al llegar a casa e ir a instalar la tarjeta la "sorpresa": me habían dado una PCI cuando yo necesito una AGP. Llamada a la tienda y nuevo paseo, esta vez a la carrera porque la tienda cerraba y no llegaba. Cambio de cajas again (esta vez comprobando el contenido, por si acaso) y vuelta a casa. El trayecto de 45 minutos de ida hecho en 20 corriendo... el de vuelta en hora y media, ya reventada. A estas alturas mi salud física, mental y moral estaba por los suelos.
Llego a casa y me dispongo a probar la tarjeta (es una nVidia). Hago una nueva partición, de pruebas y un cabrón me la ataca, metiendome virus hasta en el ejecutable del antivirus (joder, hasta infectó la calculadora y el paint). Desinfectar, volver a instalar... tirarse de los pelos y darse de cabezazos contra la pared en el proceso. Todo eso en hora y media mas...
Cenar en 10 minutos un filete frio y seco y seguir probando, configurando, desinfectando...
Jugar al Guild Wars, por fin... y descubrir que la he cagado (again). Ganas horribles de ponerme a ver "Un dia de furia" pero el emule aun no funciona... a aguantarse.
Por ahora parece que la tarjeta aguanta... y tengo el alma cansada, de veras...
Aighs...
5 comentarios:
La informática te odia, creo yo...
Ya es mala pata todo lo que te ha pasado...
¿La informatica me odia? ¡Es lo que he estudiado! >.<
Yo apostaría por una relación amor odio u_u... venga ánimos chiquilla n_n
XD ya lo sé... XD pero vamos, toda esta sucesion de hecho catastróficos debe querer decir algo...
( no quiero saber lo que pasará el dia q intente cambiar algo de mi ordenador...pfff)
Guild Wars merece tanto sacrificio.
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