Ayer tarde tuve que ir a devolver un juego que me habían vendido mal (faltaba uno de los discos y además no se instalaba). Tras el paseo, ya que la tienda de marras está al otro lado de la ciudad, me dió por, junto con la amiga con la que iba (un saludo, Urui), meterme al Campo grande y hacer unas fotillos.
Unos gansos canadienses haciendo cosas pervertidas... Urui se empeñó en sacarles así.
Unos gansos canadienses haciendo cosas pervertidas... Urui se empeñó en sacarles así.
Cuando están sin hacer perversiones son mucho más bonitos, ¿no creeis?
Un pavo real, de los normales... el albino cada vez que sacabamos la camara cerraba la cola y se metia entre los árboles... otra vez será.
El pavo nos miraba de forma inquietante...
... hasta que vió a un niño pequeño (un guiri francés) con un bocata. Que manera de gritar del niño cuando el pavo se fijó en el.
Un faisán dorado, cuando nos acercamos para la foto chilló en lo que a mi me pareció una excelente imitacion de uñas arañando pizarra a un volumen bestial.
Y, finalmente, una bonita composición en la que el sol de la tarde iluminaba la fronda.
Vamos, que si os pasais por Pucela, no dejeis de daros un buen paseo por el Campo Grande.
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